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  • La Astronomía en los pueblos andinos

A lo largo de la gran cadena montañosa de los Andes se pueden divisar un sinnúmero de construcciones que se agitan con la presencia o ausencia de la luz solar. A estos sitios, conocidos como marcadores solares, se los considera observatorios astronómicos (pukara, katikilla), todos aglutinan vastos conocimientos sobre la cosmogonía del Hanan pacha.

Con los conocimientos astronómicos obtenidos a lo largo del kapak ñan, establecieron las líneas acimutales, cuya información posiblemente sirvió para la elaboración del calendario agrícola y para ubicar las construcciones (tula, pukara) en dirección a la salida del sol en los equinoccios y solsticios. Estos saberes y conocimientos hicieron posible crear los primeros calendarios de la humanidad en Mesoamérica, permitiendo detectar el inicio de la estación de lluvias, los tiempos secos para cuidar los cultivos y estar atentos a las catástrofes naturales en la región. Estructuraron el tiempo en un concepto circular-cíclico y no en forma lineal (principio-fin) como lo hace la cultura occidental. La exactitud de sus cálculos astronómicos se ratificó en el siglo XXI mediante análisis de imágenes satelitales.

Los pueblos de la mitad del mundo, por su ubicación en el centro de la esfera terrestre, identificaron cuatro posiciones de la Tierra con relación al Sol, correspondiendo a las celebraciones ancestrales en el año. Así, en los equinoccios (Pawkar Raymi, Kolla Raymi), el sol se sitúa en el plano de la línea ecuatorial y la tierra se aproxima en su máxima expresión al astro rey, marcando el inicio de la primavera y del otoño. Mientras que los solsticios (Inti Raymi y Kapak Raymi) indican el comienzo del verano y del invierno, el sol alcanza la mayor declinación y proyecta su luz sobre la máxima latitud geográfica de la Tierra; la duración del día y de la noche es la misma en toda la esfera.

Se consideran leyes físicas las fuerzas universales que ejercen su influencia sobre la Tierra, en mayor o menor medida dependiendo del lugar en el que se encuentre la esfera terrestre en su tránsito por su órbita. Entre ellas tenemos: la fuerza de la gravedad terrestre, la atracción de la luna, el electromagnetismo, la radiación solar, el magnetismo terrestre, entre otras. Una mínima variación de una de estas fuerzas puede causar efectos notorios en sus habitantes, tanto vegetales como animales.

La primera celebración que marca el inicio del año andino es el Pawkar Raymi, que corresponde al 21 de marzo, cuando el equilibrio de las leyes físicas es el más óptimo para la fecundación de los seres vivos, razón suficiente para asumir la denominación de "el tiempo de la feminidad"; época en que los vegetales florecen, ya que donde hay una flor hay fecundación de gametos.

El Inti Raymi inicia el 21 de junio, fecha en que las condiciones físicas y energéticas del kay pacha son favorables para que el gameto fecundado (semilla) lentifique la velocidad de división celular e ingrese en una vida de latencia. Los agricultores recolectan las semillas más óptimas para el almacenamiento, mismas que son colocadas en condiciones favorables para su conservación incluso por un tiempo prolongado, época denominada como "tiempo de la masculinidad". En este periodo la esfera terrestre se aleja del sol.

Kulla Raymi inicia el 21 de septiembre, cuando la Tierra se encuentra en su máxima aproximación al astro rey. Las condiciones han cambiado con relación al periodo anterior; ahora se vuelven favorables para la reactivación de la división celular en las entrañas de las semillas, fenómeno biológico que se conoce como germinación, tiempo denominado de la feminidad. Durante el equinoccio de septiembre se siembran en sus campos, la Tierra se aglutina de todo su esplendor, integridad y fecundidad; las condiciones físicas de la Gea son favorables para recibir la semilla en sus entrañas.

Finalmente, el Kapak Raymi inicia el 21 de diciembre, etapa en que las condiciones son óptimas para que la división celular alcance la máxima velocidad, razón por la que se le conoce como la época del crecimiento o tiempo de la masculinidad. La esfera terreste está alejada del tayta inti.

Finalmente, el Kapak Raymi inicia el 21 de diciembre, etapa en que las condiciones son óptimas para que la división celular alcance la máxima velocidad, razón por la que se le conoce como la época del crecimiento o tiempo de la masculinidad. La esfera terrestre está alejada del tayta inti.

En cada una de las celebraciones (raymikuna), los pueblos originarios de los Andes interactúan con las fuerzas universales y se vinculan a ellas con el fin de aprovechar las condiciones favorables para buscar restablecer su salud física, energética y emocional. A las celebraciones acompañan los kuyuri (movimiento armónico corporal) de sus participantes, quienes demuestran sus dotes para generar movimientos armónicos a nivel personal o grupal, acompañados de la algarabía que caracteriza a estos eventos. La actividad central de las ceremonias es el proceso de aprendizaje intergeneracional entre los adultos (sabios, yatiri, chamanes) y los jóvenes que participan activamente en estos acontecimientos en los lugares sagrados a lo largo del callejón interandino.

Otra actividad de importancia en estas fechas es el baño de purificación en las cascadas, celebraciones encabezadas por los hampikkuna, chamanes y taytakuna. Se comparte la tradicional pampamesa con productos cocidos en la pachamanca,, que contiene alimentos como papa, melloco, fréjol y otros, combinados con diferentes carnes, especialmente la de cuy y ovino; en la pampamesa no debe faltar el ají molido en piedra y la “chicha de jora”, bebida tradicional de los pueblos ancestrales.

Como conclusión, diremos que los pueblos originarios orientan su convivencia bajo los resultados de los análisis astronómicos y la influencia de las fuerzas universales en cada individuo. Al correcto equilibrio de las fuerzas físicas universales lo denominan sumak kawsay, el cual permite la convivencia armónica con la madre tierra, la perpetuación como especies; una mínima alteración de este equilibrio es suficiente para cambiar la capacidad de reproducción y conllevar a la extinción de la vida. A lo largo de la historia hemos presenciado la desaparición de varias especies que no lograron readaptarse a la misma velocidad del cambio de las fuerzas universales en la faz de la Tierra.

Fuente:

  • Tata Emilio Achocalla. Centro Cultural Autóctono Sartañani Wasuru Qhanampi (Levantémonos con la luz del ayer).
  • Abad Medina, A.; Astronomía y Mathematica: AstroMath. Zaragoza 1994.
  • Català Poch, M.A.; El calendario Gregoriano. AAA. Año 6, nº32. Lérida 1987.
  • Siegel, E.; Measuring the tild of the Earth on the solstice. http://scienceblogs.com/startswithabang/
  • Viñuales  Gavín,  E.,  Ros  Ferré,  R.M.;  La  fotografía,  una  herramienta  para  hacer Astronomía. Mira Editores de Zaragoza. Marzo 1995.
  • Señal Colombia RTVC: https://www.senalcolombia.tv/cultura/astronomia-ancestral-estrellas-indigenas,
  • Scielo Mapuche - Pawenche: https://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-68942016000200006
  • Boletin del museo chileno de arte precolombino: https://boletinmuseoprecolombino.cl/wp/wp-content/uploads/2015/12/boletin-vol11-2-04.pdf